5 maneras de hacer que tu ordenador vaya más rápido May 11, 2009

1. Meterlo en el AVE

2. Ponerlo encima de un monopatín y tirarlo por una cuesta.

3. Tirarlo por la ventana.

4. Ponerle ruedas y un motor de cortacesped.

5. Ponerlo encima de un cuadrunee.

Dedicado a las cientos de páginas de divulgación informática que no me interesan pero veo cada día gracias a Stumble Upon.

De cómo el que suscribe está como una pu*a cabra May 10, 2009

De la fachada de mi residencia cuelga un cartel. De cerveza, en este momento (los cambian cada poco).

En dicho cartel se puede leer el típico disclaimer diciendo lo peligroso que es beber sin moderación. Mi habitación está justo situada entre el jest (es) y niebezpieczny (peligroso), concretamente en el “[…]T NI[…]”. De las dos ventanas, una de ellas tiene una gran “T” y la otra parte de una “N” y una “I” (ver fig. 1).

Un día hace no mucho con los dos botes de gel de baño (para abuelas*) que compramos venían en promoción dos sobres de champú. Venían pegados a los botes de gel con unas tiras de cinta adhesiva. Mientras ordenabamos las bolsas de la compra, cogimos dichos sobres de champú y los pegamos en la ventana de manera aleatoria, en el sitio donde guardamos los botes de gel.

El otro día, intentando dormir (en el cuarto de al lado cada poco montan unas bacanales de flipar, y nos pasamos muchas noches muertas mirando al techo y oyendo temazos del panorama musical electrónico polaco) miré a la ventana y me di cuenta de que, desde mi posición, tumbado, el mosaico formado por la ventana, el cartel y los sobres, parecía un conejo gigante extraño trepando por la pared, quizá golpeando la ventana de mi cuarto.

Aún hoy, de vez en cuando, compruebo que no se haya movido.

Sólo por si acaso…

*. Dado que somos estudiantes erasmus, compramos geles de baño de marcas blancas polacas (que son más baratos). Después de dar varios palos de ciego con geles que olían raro, encontramos uno que parecía que nos gustaba a todos. Tras dar algunas clases de polaco descubrimos que es un gel “de regeneración” para “pieles ancianas”. Cuando vuelva voy a tener la piel más suave que los viejos de Coccoon.

Chuck mola May 6, 2009

Que tengo esto manga por hombro desde hace ya un ratejo, así que en mi línea de vago cum laude, posteo una cancionzaca y sigo pensando qué postear.

A bailar, que llega el veranito y si no, no entramos en el bikini ^^.

El temazo es Cobrastyle (feat. Mad Cobra) – Teddybears, y es una de las canciones recurrentes en el repertorio de Chuck.

Por cierto, tengo Tuiter, así que si a alguno le gustan mis desbarres ocasionales, que me Fologüee, que es muy triste pasárselo bien actualizándolo para que sólo te lean dos personas xD.

To not feel good unless you stay January 29, 2009

Asuka Sakai, Ado Mizumori – A Crimson Rose and a Gin Tonic January 7, 2009

Katamari Damacy. Sigue sorprendiéndome…

Y si no te enamoras de la cantante con el “shubi dubi dubi dubi du” de los últimos segundos de la canción, háztelo mirar…

I’m From Barcelona – The Painter (Live in the Secret Garden) January 2, 2009

Sacada también de “How I met your mother”. La verdad es que a partir de la segunda temporada han metido mucha música muy crac. Hasta tienen un temazo de Bloc Party.

Viva el Happy Pop.

Son treinta personas. Y en realidad son suecos. Más aquí.

Y la versión del álbum aquí. Si queréis bajarla (o cualquier otro tema de Goear) usad Download Helper, plugin fundamental de firefox.

The Decemberists – Here I dreamt i was an architect January 2, 2009

Música sacada de “How I met your mother”, mi serie fetiche del momento.
La letra tras el salto.

(more…)

Derrota January 2, 2009

Con un gesto, el gladiador arranca su hoja del corazón de su enemigo. La gente le vitorea y, ¿qué demonios?, posiblemente él mismo se deje llevar por su propio entusiasmo. Al fin y al cabo él es el que está vivo, es él el que respira el aire polvoriento de la plaza mientras la vil alimaña que le retó por su honor es el que sangra su vida por la herida del pecho. Pero no. Muy en el fondo, él se sabe derrotado. Cierto es que no morirá aún. Cierto también que sus heridas no le duelen. Su vida no está cayendo a la arena pero está podrida. La derrota está en la lágrima que le resbala por la mejilla. La derrota está esperando a morderle de viejo, muchos años después, cuando recuerde este combate. Cuando recuerde el final de esa persona. Cuando recuerde la palabra que su enemigo le susurró al oído antes de que él empujase su acero rompiendo presas para drenarle de vida.

Cuando recuerde “clemencia…”